Quien mira directa y permanentemente al sol, incluso en un día de eclipse, puede quedarse ciego. Reconocer la trascendencia infinita de Dios es la condición necesaria para no sustituirlo con un ídolo. El mensaje de este domingo nos pide: ¡respeta la distancia y no la niegues!
Sigue leyendoImpactos: 483







